Si Kinect ha revolucionado el mercado, no queremos ni pensar en las posibilidades que pueden derivar de un proyecto que también está en manos de Microsoft, y que se basa en el reconocimiento de campos electromagnéticos presentes en nuestro entorno.
Hablamos de un sensor/dispositivo que es capaz, basándose en la presencia de campos electromagnéticos, como el cableado de nuestro hogar, detectar nuestra posición y los cambios o gestos del usuario con respecto a estos campos.
En la práctica, esta tecnología podría servir para, con un simple gesto, controlar dispositivos de la casa, luces, persianas, aparatos electrónicos… con sólo acercar nuestra mano a cierta parte de la pared o realizar un gesto determinado. Pero es sólo un ejemplo, porque las aplicaciones parecen ser de auténtica ciencia ficción.
Por supuesto, la relación con Kinect se basa en que esta tecnología podría aplicarse igualmente al campo de los videojuegos, dejando a Kinect a la altura de un juego de niños.
Fuente: www.newscientist.com